Por: María Catalina González Cortés
Uno de los principales problemas de Colombia es la desigualdad. Esta se evidencia de muchas formas, desde la distribución de la tierra, hasta problemas de género, pero uno de los principales focos de inequidad en el país es la educación superior. Estos últimos se han desarrollado desde una lógica mercantilista de origen neoliberal. Lo anterior hace que se necesite una sociedad eficiente de individuos que produzcan, lo cual deja en el olvido las relaciones sociales que nos condicionan, dejando que la educación se vea solamente como una meritocracia excluyente, sobre todo cuando hay privatización.
La importancia de que la educación superior sea pública y el Estado ayude a potencializarla radica en primer lugar en el hecho de que la educación es un derecho el cual debe garantizarse a todas las personas sin exclusión. En segundo lugar, le abre una ventana de oportunidades a los niños y jóvenes de las periferias del país, ya que “El 70% de los niños y jóvenes que no acceden a la educación en Colombia provienen de las zonas rurales y regiones apartadas del centro del país” (Gutiérrez, 2019). En tercer lugar, los jóvenes y sus familias dejan de endeudarse en créditos, los cuales tienen excesivas tasas de interés, además los jóvenes nunca terminan de pagarlos. Por último, “Con un presupuesto que no aumenta de manera estructural desde 1993, las 32 universidades públicas deben financiar con recursos propios el 45 % de sus actividades” (Mora & Múnera, 2018), por eso el Estado debería dejar de dar becas y centrarse más en el cuidado de la educación pública, para que todos tengan las mejores herramientas y las mismas capacidades para tener un trabajo.
Así que lo que se necesita es dejar a un lado la educación privada. Cómo se puede hacer esto, en primer lugar, se inicia por eliminar la exclusión en la educación superior, lo cual se haría eliminando las universidades privadas y convirtiéndolas en universidades públicas, con lo cual se ayudaría a desaparecer las diferentes clases sociales, puesto que todos los estudiantes accederían a una educación superior porque desean educarse y no por tener una capacidad económica superior, ahí se eliminaría la meritocracia en la educación.
En segundo lugar, deberían enfocarse en la periferia, esto quiere decir que se necesita manejar mejor los recursos de los gobiernos locales en relación a la educación, pues Colombia debería reformar su sistema de distribución de ingresos para que no se concentren en ciertas zonas del país y se debería llevar la educación superior a zonas donde no ha llegado, una educación descentralizada, además se debe otorgar ofertas educativas en las zonas rurales para que no se vean brechas entre estas y las zonas urbanas.
En tercer lugar, se eliminaría el Icetex ya que los estudiantes no deberían pedir préstamos, ni tener que endeudarse con el Estado, pues las cuotas para las universidades públicas serían mínimas y de acuerdo de los ingresos de las personas.
Por último, el programa ser Pilo Paga requiere de $4 billones para asegurar a los estudiantes becados. Esa plata se les otorgó a los estudiantes por mérito, pues los que eran más inteligentes, con icfes superiores, se ganaban esas becas, pero qué pasaba con los otros miles de estudiantes de zonas rurales que no podían acceder al programa ya sea porque su educación secundaria no les dio las herramientas para desarrollar las mismas habilidades que los estudiantes que sí pasaron las pruebas, pues estos jóvenes no accedieron a la educación superior. Además, que varios de los pilo paga se veían envueltos en temas de exclusión por las universidades privadas al no tener los mismos accesos económicos que sus compañeros.
En resumen, lo que se debe tener en cuenta es que la privatización de la educación superior destruye el sueño de miles de jóvenes colombianos de obtener un título universitario y además viene acompañado de temas de exclusión, discriminación, mal manejo de los recursos en educación, brecha de clases sociales y endeudamiento de los jóvenes y sus familias. Así que mi propuesta inicial es desprivatizar toda la educación superior para así ir avanzando y apoyando a los jóvenes donde la educación superior no ha llegado y así mismo lograr el tan anhelado bien común.
Referencias
Gutiérrez, L. (2019). La educación: un grave problema de la ruralidad colombiana. Universidad de los Andes. Disponible en línea: https://agronegocios.uniandes.edu.co/2019/04/03/la-educacion-un-grave-problema-de-la-ruralidad-colombiana/
Mora, A & Múnera, L. (2018). “Ser pilo no paga”: privatización, desigualdad y desfinanciamiento de la universidad pública en Colombia. Revista Unal. Disponible en línea:https://revistas.unal.edu.co/index.php/cienciapol/article/view/73369/72095
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